Laberintos

El laberinto ha fascinado a la humanidad desde el comienzo de los tiempos.

Aunque la leyenda de su creación se remonta a la Grecia antigua, sus formas materiales eclosionaron en el mundo moderno y se han mantenido hasta nuestros días, como una metáfora sólida del juego o del castigo. Con una mezcla de curiosidad, intriga y miedo, nos hemos ido asomando a sus distintas formas, reales o imaginarias. El poder de esta imagen se ha dejado sentir en la literatura y en las artes tanto como en la filosofía o la política. Presente en catedrales y jardines también alcanza la literatura, la biología o la política, ¿Cómo no pensar en los laberintos de Borges o de Kafka?; ¿no son acaso nuestras huellas dactilares el fiel reflejo del laberinto de nuestra identidad?; ¿no es el laberinto del oído interno el que nos mantiene en equilibrio? ¿Y qué hay de nuestros laberintos contemporáneos? ¿Cómo pensarlos? ¿Acaso nuestro presente de multitareas y multipolaridad, de big data y algoritmos, de pluralidad casi infinita e instantánea de opciones, no nos sugiere que vivimos encerrados en un laberinto como el del minotauro del mito clásico? ¿Conserva aquella historia algo de verdad? ¿Es el ser humano del siglo XXI el nuevo Asterión que ha perdido el norte en el trabajo, en el ocio, en la política, en la familia, en la ciudad o en la historia? ¿O más bien disfrutamos perdiéndonos en enigmas sin respuesta y en caminos sin salida? ¿Quiénes son, entonces, las nuevas Ariadnas, los nuevos Teseos y los nuevos Dédalos e Ícaros?

El Festival de las Ideas 2025 quiere explorar y recorrer los laberintos de nuestro presente. Por ello, invitamos a pensar en las paradojas de nuestro tiempo, en nuestros lugares de reclusión o de refugio, en nuestros deseos de liberación, en nuestros falsos libertadores, en nuestros monstruos. Queremos hablar, como en el mito clásico, de las mil y una maneras en las que podemos habitar nuestros nuevos perdederos.

Javier Moscoso y Marcela Vélez
Directores artísticos