El amor es uno de los sentimientos más discutidos de los últimos tiempos. Recibe ataques de muchos frentes y muy variados. Mientras que, para muchos, lo consideran responsable de algunas de las formas más nefastas de desigualdad entre los sexos, para otros, sobre todo para el colectivo LGTBI, la libertad de amar está en la base de muchas de sus reivindicaciones. No por casualidad, a lo largo y ancho del planeta y de la historia, las historias de amor más famosas han sido aquellas en las que los amantes reivindican sus sentimientos en el contexto de situaciones asfixiantes. Desde Romeo y Julieta hasta Layla y Majnún, o desde Calisto y Melibea hasta los protagonistas del Pabellón de las Peonías, los amantes más legendarios son aquellos que se oponen a la convención o a la norma social, aquellos cuyo amor está prohibido por la ley o la costumbre. Los enamorados más famosos de todos los tiempos son distintos ya sea porque les separa la edad, la profesión, la religión o la cuna. De ahí que el amor haya sido también reivindicado como parte de la revolución democrática. Esa es una de las preguntas que intentaremos responder. El amor, ¿iguala? ¿o no? ¿Es una fantasía, como escribe Rosenwein?

En esta ocasión para los pros y los contras de esta pasión tan controvertida, de la que tanto se habla ya sea por experiencia propia o interpuesta, contaremos con la presencia de una de las grandes historiadoras de las emociones del contexto internacional. Barbara Rosenwein, profesora emérita de la Universidad de Loyola, en Chicago, es mundialmente conocida por su discusión de las “comunidades emocionales” de la baja media; una expresión que más tarde la propia Rosenwein, y otros, han extendido a otros ámbitos y situaciones. Experta en otras experiencias emocionales, como la ira, por ejemplo, o las emociones de la vejez, sobre las que versa su último libro, Rosenwein es también la autora de un libro extraordinario, Amor. Una historia en cinco fantasías, recientemente traducido al castellano.